Nunca había visitado Córdoba y en menos de un año he estado tres veces. Una en el viaje de Navidad del año pasado que fuimos a Málaga y paramos en Córdoba (donde me enamoré de la ciudad). Después este verano para empezar el viaje a la Toscana. Y este fin de semana para disfrutar de la Spartan Race Córdoba.
El viaje empezó genial. Coincidiendo con mi Anika en el tren y donde compartimos tren de ZGZ a Córdoba. Cruzamos gran parte de España en el vagón cafetería hablando y arreglando el mundo.
Y el sábado tocó la Spartan. Sufrí un poquillo pq hacía meses que no participaba en ninguna carrera y lo he notado. Pero genial y disfrutando.
El domingo, aunque llovió, fue un día mega interesante y con ganas de volver a Córdoba.
El otro día, en la EOI fui a una conferencia sobre el Muro de Berlín. Conocía bien poco de esta historia. Solo sabía que había dos Alemanias separadas por el muro, que Berlín (a su vez) también lo estaba y poca cosa más.
Pues gracias a la conferencia, con motivo de los 30 años de la caída del muro, conocí como se fue gestando esa frontera y como surgían cada vez más problemas originados, sobretodo, por la política (como siempre). Decisiones políticas que nunca piensan en el pueblo y la toman gente a la que le importa poco el pueblo.
Me dejó realmente impactado. Nos explicaron, con vídeos y fotos, de la época, como se fue desarrollando toda esa locura con un país que ya estaba devastado por la 2ª Guerra Mundial y que con el muro...sobretodo la población de Alemania del Este aún siguió sufriendo.
Finalmente, lo que más me impactó fue la historia de Peter Fetcher, un joven que intentó cruzar el muro de Berlín para pasar a la otra Alemania, y que por culpa de los acuerdos políticos, murió desangrado entre las dos Alemanias sin que nadie pudiera socorrerle. Y más sorprendentemente, fue descubrir que la canción de LIBRE de Nino Bravo trata del caso de Peter Fetcher.
Me dejó muy tocado la conferencia. Y lo peor de todo, es que políticamente...todo podría volver a pasar y cosas peores, y los políticos a lo suyo.
De momento, una funda provisional y dentro de 3-6 meses una funda definitiva. Con la provisional me noto mucho mejor, mi sonrisa ha mejorado ya que la nueva funda tiene un tamaño más ajustado y un tono similar al resto.
Y hoy también me han hecho un estudio de ortodoncia para arreglarme los dientes apiñados.
Anoche empecé nuevo libro: LA SOSPECHA DE SOFÍA de Paloma Sánchez-Garnica.
Las primeras páginas prometen y me recuerdan un poco a TODO ESTO TE DARÉ y MI RECUERDO ES MÁS FUERTE QUE TU OLVIDO.
La anodina vida de Sofía y Daniel cambia radicalmente cuando él recibe una carta anónima en la que se le dice que Sagrario, a la que venera, no es su verdadera madre y que si quiere conocer la verdad de su origen debe ir a París esa misma noche. Intrigado, pregunta a su padre por esta cuestión y él le recomienda que lo deje pasar, que no remueva el pasado. Sin embargo, hay preguntas que necesitan una respuesta y esta búsqueda desencadenará una sucesión de terribles acontecimientos y encuentros inesperados de infortunado desenlace que trastocará su vida y la de su mujer, Sofía, para siempre. Madrid, París y su mayo del 68, el muro de Berlín, la Stasi y la KGB, los servicios de contraespionaje en la España tardofranquista y tres personajes en busca de su identidad son las claves de esta fantástica novela con el inconfundible sello de Paloma Sánchez-Garnica.
Las primeras páginas prometen y me recuerdan un poco a TODO ESTO TE DARÉ y MI RECUERDO ES MÁS FUERTE QUE TU OLVIDO. Así que...a ver si este libro me saca el mal sabor de boca que me ha dejado LA SEÑAL, que lo dejé a menos de 200 páginas (digitales) pq aunque prometía...me desenganché brutalmente hacia el final.
4 Días de fiesta y sin saber qué hacer. Por tanto...a improvisar. Eso es lo que hicimos Mireia y yo. La noche de la castanyada me hizo una propuesta y dije que sí sin pensármelo.
Esta mañana, Mireia y yo hemos salido súper puntuales para hacer El Congost de Mu. Una ruta cortita de 6'5 km (y luego deshacerlos), muy sencilla y con vistas bastante bonitas. Hemos podido disfrutar de la tranquilidad y de los colores otoñales de los árboles.
A la vuelta, han empezado a llegar mucha más gente que habían pensado lo mismo que nosotros. Pero por suerte y gracias a nuestro madrugón hemos podido hacerlo casi todo el rato solos y tranquilos.
Una experiencia bastante genial. Y la verdad es que a 50 kms de Lleida poder tener estas vistas...no tiene precio.