Ayer celebramos la primera cena del año con los amigos que aún no pudimos reunirnos estas Navidades. La cena fue temática por casualidad. Todo surgió por la palabra RENDIVÚ, que debe ser una adaptación de la expreión francesa RENDEZ-VOUS, pero con RENDIVÚ era como más lleidatà y fue el motivo o la excusa para que la cena fuera de temática francesa.
Así que con soufflés, croissants, vino, omelette de pommes de terre, fromages y cositas varias nos reunimos y celebramos una cena de inicio de año, con campanadas incluídas genial y con un regalo del amigo invisible que siempre acierta.
Una gran cena, ¡tres jolie!
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